Hace ya demasiado tiempo que estamos inmersos en un nuevo proceso electoral en Atento Coruña, debido a la finalización del mandato que el 30 de marzo de 2004 iniciamos los actuales miembros del comité de empresa.
El pasado 17 de enero, UGT-CC.OO. convocaron juntos las elecciones sindicales y fijaron la fecha de inicio del proceso para el 31 de marzo. Pero la empresa alegó –con razón, por esta vez- que los promotores (UGT-CC.OO.) no se lo comunicaron en plazo. A su vez, ambos sindicatos nos aseguran que su demora en comunicarlo a Atento “fue un error” y presentan un nuevo preaviso de elecciones fijando el 28 de abril como fecha de comienzo del proceso electoral.
El 28 de abril se constituye al fin la mesa electoral (formada por el trabajador de mayor antigüedad y los de mayor y menor edad), encargada de velar por el buen cumplimiento de todo el proceso. Se confecciona el calendario electoral y la fecha de votación se fija para el 28 de mayo.
La CGT reclamó a la mesa electoral que el censo electoral no era correcto al no incluir a trabajadores en situación de excedencia voluntaria. Lo mismo hizo UGT. Además, CIG reclamó que el número de representantes a elegir para el nuevo comité de empresa tampoco era correcto. Nuestras reclamaciones no fueron aceptadas, por lo que impugnamos el proceso electoral. La administración provincial, a través de un árbitro designado para estos casos, nos dio la razón y obliga a retrotraer el proceso al momento de elaboración por la mesa del censo electoral, siendo necesario que la empresa entregue el censo laboral previo.
La empresa, que en este asunto sólo tiene un papel de colaborador aportando la documentación y el material necesarios (censo de trabajadores, sala para reuniones y votación, urnas y papeletas…), se inmiscuye pretendiendo manipular y coaccionar las decisiones de la mesa electoral. Su desfachatez llega al extremo de enviar a un abogado de Madrid para decir públicamente a los sindicatos que Atento impugnará en el juzgado el laudo arbitral que nos da la razón.
Al margen de las intenciones perversas de la empresa, la mesa electoral –en cumplimiento del laudo- nos reunió para entregarnos el nuevo censo de trabajadores y confeccionar un nuevo calendario electoral. La votación –que en el primer calendario electoral estaba prevista el 28 de mayo- se fijó para el próximo 19 de junio, en horarios de 7:30 a 8:30 y de 11:00 a 20:00 horas. Ya veremos si no hay más contratiempos y si la empresa sigue poniendo impedimentos a nuestros derechos laborales.
Un proceso de elecciones sindicales se puede realizar en dos meses en su totalidad, con lo que a estas alturas –entre la negligencia de los promotores y la injerencia de la empresa- podríamos tener un nuevo comité hace tiempo. ¿Cuánto tiempo más tenemos que esperar y cuáles son los intereses ocultos en demorar este proceso?
El pasado 17 de enero, UGT-CC.OO. convocaron juntos las elecciones sindicales y fijaron la fecha de inicio del proceso para el 31 de marzo. Pero la empresa alegó –con razón, por esta vez- que los promotores (UGT-CC.OO.) no se lo comunicaron en plazo. A su vez, ambos sindicatos nos aseguran que su demora en comunicarlo a Atento “fue un error” y presentan un nuevo preaviso de elecciones fijando el 28 de abril como fecha de comienzo del proceso electoral.
El 28 de abril se constituye al fin la mesa electoral (formada por el trabajador de mayor antigüedad y los de mayor y menor edad), encargada de velar por el buen cumplimiento de todo el proceso. Se confecciona el calendario electoral y la fecha de votación se fija para el 28 de mayo.
La CGT reclamó a la mesa electoral que el censo electoral no era correcto al no incluir a trabajadores en situación de excedencia voluntaria. Lo mismo hizo UGT. Además, CIG reclamó que el número de representantes a elegir para el nuevo comité de empresa tampoco era correcto. Nuestras reclamaciones no fueron aceptadas, por lo que impugnamos el proceso electoral. La administración provincial, a través de un árbitro designado para estos casos, nos dio la razón y obliga a retrotraer el proceso al momento de elaboración por la mesa del censo electoral, siendo necesario que la empresa entregue el censo laboral previo.
La empresa, que en este asunto sólo tiene un papel de colaborador aportando la documentación y el material necesarios (censo de trabajadores, sala para reuniones y votación, urnas y papeletas…), se inmiscuye pretendiendo manipular y coaccionar las decisiones de la mesa electoral. Su desfachatez llega al extremo de enviar a un abogado de Madrid para decir públicamente a los sindicatos que Atento impugnará en el juzgado el laudo arbitral que nos da la razón.
Al margen de las intenciones perversas de la empresa, la mesa electoral –en cumplimiento del laudo- nos reunió para entregarnos el nuevo censo de trabajadores y confeccionar un nuevo calendario electoral. La votación –que en el primer calendario electoral estaba prevista el 28 de mayo- se fijó para el próximo 19 de junio, en horarios de 7:30 a 8:30 y de 11:00 a 20:00 horas. Ya veremos si no hay más contratiempos y si la empresa sigue poniendo impedimentos a nuestros derechos laborales.