El pasado jueves día 22 de enero se reunía la comisión paritaria de interpretación del convenio (formada por los liberados de UGT-CC.OO. y la patronal) para confeccionar las tablas salariales para el año 2009, toda vez que no había lugar a calcular los atrasos del año anterior porque -sorprendentemente- el IPC que en el mes de julio había alcanzado el 5,3% acaba siendo para todo el año 2008 el 1,4%.
Lo que parecía una tarea sencilla (aplicar lo pactado en convenio a los distintos conceptos retributivos, sumando el 2% del IPC previsto para el 2009 y el 0,25% de subida salarial) se ha convertido en un nuevo conflicto laboral en todas las empresas del sector. La patronal propuso una única subida del 0,5% después de actualizar los salarios de 2008 a la baja (con el IPC al 1,4%). Esto es, reducen el salario pactado de 2008 en un 0,6% para luego subir un 0,5%, lo que supone que los trabajadores del sector cobraríamos un 0,1% menos que en 2008. Por el momento, la comisión paritaria no se ha puesto de acuerdo.
Las empresas han decidido de nuevo meter la mano en nuestros bolsillos. Ya no se conforman con pagarnos poco y tarde, ahora quieren robarnos lo que es nuestro por derecho. La CGT emprenderá las acciones oportunas para que se cumpla lo pactado en convenio, ya de por sí insuficiente.
Lo que parecía una tarea sencilla (aplicar lo pactado en convenio a los distintos conceptos retributivos, sumando el 2% del IPC previsto para el 2009 y el 0,25% de subida salarial) se ha convertido en un nuevo conflicto laboral en todas las empresas del sector. La patronal propuso una única subida del 0,5% después de actualizar los salarios de 2008 a la baja (con el IPC al 1,4%). Esto es, reducen el salario pactado de 2008 en un 0,6% para luego subir un 0,5%, lo que supone que los trabajadores del sector cobraríamos un 0,1% menos que en 2008. Por el momento, la comisión paritaria no se ha puesto de acuerdo.
1 comentario:
Es vergonzoso e indignante que estas empresas puedan dejar en la calle a los trabajadores impunemente y peor aun, saber con toda seguridad, que no habrá autoridad alguna que los ampare y vele por sus intereses. Espero que a esta hora tengan claro los 300 que sólo éllos, unidos y firmemente decididos a dar la batalla, harán posible que se reconozcan sus derechos.
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