El
pasado viernes Atento despidió de forma despreciable a tres compañeras del
1004, faltándoles al respeto y a su dignidad al pretender justificar su despido
por la falta de ventas en los dos últimos meses.
Poneos en la piel de una compañera que fue premiada
por la empresa por sus ventas y a los pocos días, estando de vacaciones, se
encuentra con un burofax que le
comunica su despido disciplinario por no vender... Olvídate de las
ventas e imagina que mañana te despiden a ti; porque transferiste más llamadas
de las que debías, o porque no ofreces productos en todas las llamadas, o
porque tu TMO es demasiado alto o por tus notas de calidad.
Atento
siembra el pánico, lanza el mensaje escogiendo a tres víctimas sin que le
importen las circunstancias ni la indemnización que tendrán que pagar. El miedo
siempre es rentable, salvo que les demostremos lo contrario: no permitamos que
cale su mensaje, defendámonos de sus
agresiones y abusos, seamos solidarios con las compañeras a la vez que nos
fortalecemos entre todos haciendo frente común.
Salgamos
a la calle a denunciar públicamente los ataques de Telefónica y
Atento a nuestros derechos. Hagamos una protesta mayoritaria para mostrarles
que no nos van a achicar ni oprimir con sus agresiones y desprecios. Plantémosles cara.
Entre todos.
Animamos a
todos los trabajadores a participar en las concentraciones convocadas por el comité de empresa mañana, 28 de noviembre, a las 12 y a las 20 horas.
CONTRA SU POLÍTICA DEL MIEDO,
POR LA DIGNIDAD EN NUESTRO TRABAJO.
SI TOCAN
A UNO, NOS TOCAN A TODOS.